Asch al ataque

28/4/08

Directamente al bajo vientre le tiene que haber caído al gobernador Alperovich la nota que publicó Hugo Asch en Perfíl, titulada: "Alperovich y el sueño subtropical de los Kirchner". Está bien escrita y tiene algunas anécdotas que no conocía. Se nota mucho que trabajó en Tucumán y que conoce el terreno. Además, es muy porteño y sabe de qué se trata todo esto.

Una vez fui a pedirle trabajo en El Periódico. Hacía días que volvía de Buenos Aires pensando que "ahora todo será más fácil" -¡qué idiota fui!-. La escena fue más o menos así: un amigo me consiguió una entrevista y Asch accedió, para corresponder la recomendación. Sentado del otro lado del escritorio mostró "cierto" interés por mi formación profesional. Estaba en otra. Dejé una carpetita, acomodadita y con muchos recortes. Parecía la que reparten en El Semillitas cada diciembre. Salí del encuentro con dos sensaciones:
1- No me va a llamar.
2- Este es un viejo lobo de mar.

Obvio, jamás sonó mi celular y Hugo Asch regresó a Buenos Aires para trabajar en Perfil. Al leer el texto que publicó ayer... confirmé la segunda.

5 Comentarios:

Sebastián Nadal dijo...

Muy buena nota, pinta tal cual es todo lo que da vueltas por esta provincia. La frase de Tomás Eloy Martínez también, y cómo la relaciona después del último subtítulo con nuestra historia, más...
Hay que estar sentado solito haciéndole una nota a Alpe, ¿no? Eso sí, nadie se olvide de quién es Llaryora, ningún paladín del periodismo libre que digamos.

Anónimo dijo...

Una buena mamada de pito a Llaryora, alto negreador y sino pregunten en el diario...

Julio dijo...

Muchachos y muchachas, no se escuden en el anonimato para agredir. Eso no es participación.

Saludos

Julio dijo...

Como diría mi amigo Mauricio: eso no es Pro.

Doble Doble V dijo...

Muy buena nota. Pinta muy bien la situación política de la provincia.
No conozco el Currículum Vitae de Llaryora pero sea como sea el Estado no debe poder apropiarse de propiedad privada ajena y menos de medios de comunicación para convertirlos en agentes propagandísticos.
Saludos.