El vestuario se mostro tranquilo

Se perdio y punto. Esa fue la actitud tomada por el equipo argentino de Copa Davis, algo extraño para los tiempos que corren. Apenas terminado el partido de dobles, el capitan Alberto Mancini, David Nalbandian y Guillermo Cañas se mostraron tranquilos y conformes con el trabajo desarrollado durante las dos jornadas de la serie por cuartos de final de la Copa Davis, ante Suecia en Gotemburgo. Claro, con el resultado no.

"La derrota duele igual, cual sea la diferencia. Ellos demostraron un gran nivel en esta superficie. Ahora vivimos lo que viven los rivales cuando gana Argentina", dijo el cordobes, de floja tarea en los dos partidos que jugo. Tambien despejo las dudas con respecto a su futura preparacion: ""Por ahora, voy a seguir solo. Vamos bien".

Mientras tanto, Mancini sostuvo que "los partidos de ayer fueron cerrados y cuando en esta cancha se te van las oportunidades, se complica. Hoy jugaron un gran partido los chicos. Estuvo parejo y recien cuando ellos ganaron el tie break, en el segundo set, comenzaron a mejorar el saque y el partido se fue. La frustracion es la de perder. Nos gusta ganar y hay que aceptarlo".

Sobre el futuro, "Luli" fue claro: "Hay que pensar en el año que viene. Faltan 8 o 10 meses para retomar el torneo e intentar ganar la Copa Davis".

Lesionado y todo, Cañas salio a la cancha a buscar el milagro. No se dio, pero igual conservo la cordura: "La lesion lleva su evolucion normal. Ahora me tomo una semana en Buenos Aires y si hace falta una mas, me la tomo. Tal vez vuelva en Barcelona, Roma o Munich. No lo se".